‘-¡Qué ganas tengo de veros! -¿De veras? –No. De veros’. Cuando el paseante leyó esta semana un tuit con este enunciado no pudo por menos que sonreír, pues era la segunda vez en apenas tres días en que se topaba de frente con la paronomasia, una de las variantes ludolingüísticas de las que más disfruta.
La primera había sido apenas 48 horas antes, cuando, una vez más en su querido León y al ser interpelado sobre esta nueva visita había respondido, animus iocandum mediante: ‘-Ya ves. Yo dije Lyon al navegador pero la querencia debió de llevarlo a entender León’. Definitivamente, este artificio consistente en cambiar apenas una letra en una palabra para crear otras da mucho juego.
Tanto que ha propiciado el paseo de esta semana, en el que recorreremos cinco –alguno más en realidad- términos distintos que se caracterizan por la inclusión de una simple consonante en la castellanizada versión del nombre de la ciudad francesa, dando lugar a otras tantas realidades, distintas y distantes, parafraseando una vez más al presidente Calvo-Sotelo.
libón.- Esta palabra del léxico oscense, que bien podría haber aparecido en nuestro paseo por el Sobrarbe, es uno de los casi ochocientos aragonesismos presentes en el DRAE, en donde está registrada desde 1925, si bien su etimología no aparece hasta la edición de 1992. De la voz prerromana *ibone –comparable con el vasco ibai ‘río’-, designa a un manantial en que el agua sale a borbollones –atropelladamente- o a una laguna o depósito de agua –acepción que es también utilizada en la República Dominicana-.
lirón.- Tres entradas homógrafas: Una es una variante de latón, nombre de un árbol, como veremos al pasear por la última palabra de hoy; la segunda, derivada del latín lyron, procedente del griego lýron es otro nombre de otra planta: la alisma, que crece en terrenos pantanosos y tiene flores blanquecinas; la última, que tiene su origen en el bajo latín *gliro, del latín glis, da nombre a un mamífero roedor muy parecido al ratón que vive en los montes, pasa el invierno aletargado y mide unos 30 cm. de largo, de los que prácticamente la mitad corresponden a la cola.
lipón.- Aunque ya aparecía en el diccionario de Alemany y Bolufer -1917-, no ha tenido entrada en el DRAE hasta 2001. Voz coloquial que da nombre en Venezuela a una persona o animal que tiene el vientre abultado. Derivado de lipa, que también en Venezuela y coloquialmente se refiere a la barriga de los vertebrados, especialmente si está hinchada o inflada. Francisco J. Santamaría, en su Diccionario de americanismos, publicado en México en 1942, apunta que procede del francés popular lipper ‘comer y beber’. Una especie de anfibios americanos, la Pleurodema brachyops, es conocida también como sapito lipón.
Mauricio Rivera Correa http://calphotos.berkeley.edu
limón.- Dos palabras con esta grafía y de origen muy distinto. La primera, con un largo recorrido hasta llegar al castellano, adonde se incorporó desde el árabe andalusí la[y]mun, y este del árabe laymún, tras pasar por el persa limu, que lo tomó del sánscrito nimbū, es el nombre del fruto del limonero. De forma ovalada y generalmente amarillo, es jugoso, comestible y de sabor ácido. La otra designa a cada una de las varas de un coche de caballos. Procedente del francés limon, con el mismo significado, su origen es más oscuro, derivado tal vez de la misma raíz celta que el español o el portugués leme ‘timón’.
lidón.- Otro vocablo aragonés para cerrar nuestro paseo de hoy y que nos sirve para rendir nuestro modesto homenaje a José Manuel Blecua, anterior director de la RAE y autor de un estudio sobre ‘Aragón y el Diccionario de la lengua española’. Es otro nombre que se aplica en Aragón al almez, un árbol de la familia de las ulmáceas, de doce a catorce metros de altura, hojas lanceoladas y cuyo fruto, comestible, es la almeza. El Diccionario académico recoge también en esa región las formas ledón y latón, este último término rural derivado del latín vulgar loto, este del latín lotus y este a su vez del griego lōtós.
La frase de hoy
“Lina extiende con lena la lona sobre la lana a la luz de la luna”
El reto de la semana
¿Con qué tela, teniendo en cuenta las cinco palabras del paseo, habría sido lógico cubrirnos hoy?
(La solución, como siempre, en la página LOS RETOS)