Pocas ocasiones disfruta más el paseante que aquellas que le llevan a descubrir algún rincón en España inédito aún para él en el que poder disfrutar de sus paisajes y gentes; de sus costumbres y tradiciones; de su gastronomía, su lenguaje, sus historias…
Esta semana ha tenido la fortuna de visitar y pasear por el Sobrarbe, comarca pirenaica del alto Aragón, de tierras tan hermosas como duras, que alberga en su interior el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, y en el silencio de cuyas cumbres uno tiene la sensación -y no solamente en sentido metafórico- de estar tocando el cielo.
Dejamos hoy el DRAE en su plúteo para pasear por cinco palabras de estos lares que tuvimos la suerte de conocer con Cebo y Toño, magníficos guías y autor este último además de dos libros de historias sobre la zona: Relatos de un montañés y Bajo la luna.
tasca.- Prado de alta montaña -por encima del nivel de presencia de arbolado- con hierba baja, densa y fuerte que sirve de pasto para el ganado trashumante que sube en primavera para pasar el verano en estas zonas, denominadas estivas. Pueden encontrarse también en zonas más bajas, consecuencia de incendios o de la desforestación.
cadiera.- Bancos que se situaban normalmente a los lados del hogar o el fuego de la cocina. Con cabida para dos o tres personas cada uno, solían tener una mesa desplegable entre los dos asientos para poder comer o dejar cosas. Era ese lugar en el que por las noches, mientras se miraba al fuego, se narraban historias y cuentos
pleta.- Lugar al aire libre donde se recoge el ganado para pernoctar o sestear. Se conoce también por las variantes pletil, plleta o pieta. Procedente del latín plīcīta ‘tejido’ ‘reunión’, tiene conexión con el catalán pleta y el gascón pleto. Es corriente utilizar también la voz mallata, que parece emparentada con majada.
baqueras.- O bagueras, según la localidad, es el nombre que reciben las riendas para dirigir la yunta de mulas. Corominas lo considera un derivado de baga, voz regional aragonesa procedente de la acepción ‘lazada’ y esta a su vez de ‘argolla de metal por la que se pasa una barra o falleba’, del latín tardío baca ‘eslabón (de una cadena).
recau.- Plato tradicional de la zona, variante del cocido, incluye patatas, judías secas y carne de cerdo, entre otros ingredientes, admitiendo a su vez distintas combinaciones de legumbres y verduras. El cocinero aragonés Teodoro Bardají es el que dio a conocer en 1922 públicamente esta receta, asociándola a su pueblo: ‘Recao de Binéfar’.
La cita de hoy
“¡Invoco tu nombre, país del Sobrarbe!
¡Arriba, que hay que despertar!”
Himno de Sobrarbe
El reto de la semana
¿Con qué habremos brindado, como habría hecho cualquier sobrarbense, al terminar nuestro paseo de hoy?