Saben bien quienes le acompañan en estos recorridos que es el paseante propenso a ‘unir puntos’ –como decía Steve Jobs- y que cualquier estímulo le puede permitir establecer conexiones que terminan por desembocar en un paseo.
Así, un artículo sobre el músico armenio Komitas Vardapet le hizo recordar -en vísperas de la celebración de la independencia del país, el 21 de septiembre- el genocidio cometido contra ellos por los otomanos hace ahora cien años o que en el siglo XIV León V de Armenia (aún con calle a su nombre en la capital) fue señor de Madrid.
Rastreamos hoy el diccionario en busca de palabras relacionadas con el lugar en el que algunas tradiciones sitúan el bíblico jardín del edén y de cuyo pueblo se dijo que cuando dos armenios se encuentran en cualquier lugar del mundo, crearán una Nueva Armenia.
armenio.-. Del latín Arměnius y este del griego Arménios, además de ser el gentilicio de los naturales del actual país o de la antigua región caucásica llamados Armenia y dar nombre a su lengua, designa también al fiel de la Iglesia gregoriana apostólica armenia, considerada la iglesia oficial más antigua del mundo y que conserva su antiquísimo rito.
tahúr.- Deriva del árabe takfūr, que lo hace del armenio tagevor, título de los soberanos de esa nación, que adquiriría un matiz peyorativo por sus difíciles relaciones con los cruzados. Se emplea para referirse a quien tiene el vicio de jugar y, en aparente contradicción, tanto a quien es muy diestro en el juego como al jugador tramposo.
bol de Armenia.- O bol arménico; bolo de Armenia o bolo arménico, pues las cuatro formas incluye el DRAE. Es una arcilla de color rojizo procedente de Armenia usada en medicina, en pintura y como aparejo por los doradores. El médico griego Dioscórides ya hace referencia a él en el siglo I. Covarrubias, en 1611, lo recoge como bolarménico.
cilicio.- Del latín cilicĭum ‘pieza de paño fabricado con piel de cabra de Cilicia’. Vestidura áspera que se usaba antiguamente para la penitencia y hoy también una faja de eslabones con púas o cerdas que se lleva ceñida sobre la piel como mortificación. En Cilicia se ubicaba el reino conocido como Armenia Menor, cuyo último soberano fue León V.
armiño.- Mamífero carnívoro de piel muy delicada, muy blanca en invierno y, por extensión, cosa pura o limpia. Es también una figura heráldica. Del latín Armenius [mus], ‘[rata] de Armenia’, porque a pesar de provenir de tierras rusas o asiáticas, se importó a Europa desde el Mar Negro, en cuya zona Armenia era el país más conocido.
La cita de hoy
“Sencillamente, está en la naturaleza del armenio estudiar, aprender, cuestionar, especular, descubrir, inventar, restaurar, preservar, hacer y dar”.
William Saroyan
El reto de la semana
¿Con qué fruta podíamos habernos deleitado a lo largo de nuestro paseo de hoy?